Capítulo 3: Mis tres versiones (y así, las tres mujeres ALZA)

Hola, hola ✨
Soy Daniela Ugazzi

Con los años entendí que emprender no es una línea recta, sino una montaña rusa emocional.
Un día te sientes imparable, y al siguiente dudas de todo.
No existe una sola versión de nosotras cuando decidimos crear algo propio. Por eso, en ALZA, mi metodología para mujeres emprendedoras, hablo de tres personalidades que todas llevamos dentro. Antes de contarte sobre ellas, quiero hablarte de cómo nacieron.

De Quito a Madrid: una página en blanco

Hace un año y medio llegué a Madrid con la vida patas arriba. Había dejado atrás mi país, mi familia y una carrera sólida en sostenibilidad y liderazgo. Tenía experiencia, propósito y ganas, pero también miedo, dudas y una sensación profunda de vacío. Ese fue mi punto cero.
Y sin saberlo, ahí nació mi Cleopatra interior: la mujer que quiere reinventarse.

Empecé a construir mi consultora de estrategias y proyectos de sostenibilidad desde cero. Sin red, sin contactos, sin certezas. Solo con un cuaderno lleno de ideas, una maleta con experiencias y conocimiento y una frase en la cabeza: da igual, hazlo, aunque no esté todo claro. Y esa experiencia me enseñó que reinventarse no es empezar desde cero, sino desde lo vivido. De ahí nació la primera mujer ALZA:

Cleopatra — “La que quiere reinventarse”
Transformación | Propósito

Cleopatra representa a todas las mujeres que sienten que algo dentro les pide un cambio.
Quizás han tenido una carrera estable o han estado dedicadas a su familia y sienten la necesidad de hacer algo con más sentido. O, hay un hito importante en sus vidas que les propone cambiar de rumbo (nido vacío, un divorcio (como el mio)). No saben por dónde empezar, pero sí saben que ya no quieren seguir igual.

Cleopatra necesita acompañamiento, sistemas simples, estructura, y herramientas prácticas que le permitan expandir su deseo de reinvención con foco y un plan que le permita avanzar y sentirse realizada.

De la reinvención al desborde creativo

Cuando mi consultora empezó a tomar forma, sentí algo nuevo: un desborde de energía. De repente, quería hacerlo todo a la vez. En cuestión de meses me encontré:

  • asesorando empresas en sostenibilidad,

  • explorando la idea de abrir un studio de yoga,

  • formándome para traer una marca ecuatoriana de tés e infusiones a Madrid,

  • y acompañando a otras mujeres a lanzar sus proyectos.

Era pura acción. Puro entusiasmo. Y ahí apareció mi Frida interior: la mujer creativa, apasionada y un poco caótica:

Frida — “La creativa desbordada”
Energía | Creatividad

Frida representa a las mujeres llenas de ideas, talento y pasión. Las que tienen el corazón puesto en mil proyectos y la mente en constante movimiento. Son pura energía… pero esa misma energía, sin dirección, puede acabar en nada, ideas.

Frida necesita ayuda para ordenar sus ideas y traducirlas en pasos concretos que generen valor.

De la energía al propósito sostenido

Con el tiempo, empecé a ordenar mis ideas. Mi consultora se consolidó, mi metodología ALZA tomó forma y mis proyectos comenzaron a crecer. Ya no era solo cuestión de crear, sino de sostener y escalar con propósito. Fue entonces cuando descubrí otra versión de mí: mi Margaret Thatcher interior.

Margaret Thatcher — “La profesional con propósito”
Liderazgo | Estrategia

Margaret representa a las mujeres que ya construyeron algo y quieren hacerlo mejor, escalar.
Tienen resultados, clientas, experiencia… pero desean llegar a más. No quieren correr detrás de todo, sino elegir con propósito. Margaret dice: “He llegado hasta aquí, pero quiero hacerlo de forma más sostenible.”

Margaret necesita revisar su estructura, aprender a delegar, cuidar su energía y planificar su crecimiento sin perder su esencia. Su desafío ya no es empezar, sino crecer con conciencia.

Si algo he aprendido es que no somos una sola versión de nosotras mismas.
A veces somos Cleopatra, intentando reconstruirnos con miedo pero con esperanza.
A veces somos Frida, llenas de ideas y ganas de hacerlo todo a la vez.
Y otras, somos Margaret, buscando calma, estrategia y propósito.

Y, está bien… 🙂
De hecho, es gracias a esa evolución —y a la formación, al acompañamiento, la eschucha y el trabajo interno— que aprendemos a movernos entre estas etapas con más conciencia.

En ALZA entendemos que no todas las mujeres emprenden desde el mismo lugar ni con la misma energía.
Cada una tiene su historia, su ritmo y su motivación.
Y cuando comprendemos desde dónde estamos emprendiendo hoy, todo empieza a tener más sentido.

Cada versión de ti tiene algo que enseñarte.
Y cuando aprendes a escucharlas, descubres el verdadero poder de pasar de la idea a la acción, del caos a la claridad.

De la idea a la acción, hecho con propósito desde Madrid ✨
© Daniela Ugazzi |
Madrid, 1 de octubre 2025

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